jueves, 9 de julio de 2015

Perros

Perros, muchos conocemos a estos seres que nos dan tanto amor sin pedir nada a cambio, solo que les devuelvas ese amor. Pero muy pocos conocen lo difícil que puede llegar a ser la vida de algunos de ellos, en especial los callejeros.

Hoy proponemos reflexionar acerca de un tema que todos vemos diariamente pero que pocas veces hacemos algo al respecto, para esto les mostramos un video subido a YouTube donde se muestra la vida de un perro que es adoptado y luego esa familia lo abandona, reflejando la vida de un perro en la calle.


Muchas personas al ver un perro lastimado o enfermo en la calle, lo mira con pena y dice “pobrecito, está perdido”, pero no hace nada para ayudarlo. Lo que pocos saben es lo feliz que pueden hacer a estos animales de diferentes formas:

1) Existen hogares para perros perdidos o sin dueños donde uno puede jugar con ellos, pasearlos y adoptarlos, si así se quiere.
2) Rescatar a un perro de la calle y llevarlo a un hospital canino o a estos centros para perros donde estarán mejor que en la calle.
3) También podemos rescatar a un perro de la calle y traerlo a nuestro hogar. Los perros callejeros son muy agradecidos con las personas que los sacan de las calles porque les salvaron la vida, y esas personas que los rescataron son lo único que tienen. El amor de un perro de la calle no se compara con el de ningún otro, es diferente, es especial, ya que les salvaron la vida. Esto se los aseguro por que junto con mi familia rescatamos a una perra perdida a la que llamamos Brisa y se las presento...

Ella es Brisa: 


En el parque de la ciudad podemos encontrar un centro adoptivo donde podemos jugar con los perros, pasearlos y también se puede adoptar.

Joaquín Castro

2 comentarios:

  1. Morí de amor con esta nota...

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  2. Muy buena publicación! No hay nada más puro y sincero que el amor de un perro. Son seres incondicionales.
    Hace poco adopté a una perra de la calle, que tenía aproximadamente 4 años y distintas enfermedades y complicaciones, pero les puedo asegurar que lo feliz que fue esa perrita en el poco tiempo que la tuve es inexplicable. Creo que la gente, si ve a un perro sin esperanzas de vida, en lugar de lamentarse debería actuar, y, adoptarlo para darle al menos una alegría y que se olvide de tanto sufrimiento.
    La satisfacción que te genera dar sin recibir nada a cambio no se puede explicar con palabras. Y así son los animales. Ellos dan amor y lo único que esperan es recibirlo. No son egoístas, no tienen maldad.

    En mi niñez; mi mejor amigo fue mi mascota. Así que, piénsenlo. ADOPTEN.

    Cariños, Marta.



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